A poco mas de 10 días de la captura y ejecución del líder Libio Muammar Gaddafi, la comunidad internacional se pregunta si hizo bien en apoyar a esa turba que cazo como a un animal al derrocado presidente.
Pocas semanas antes de producirse el desenlace, los lideres de la CNT (Consejo Nacional de Transición) recibieron con los brazos abiertos al Presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, al Primer Ministro Británico, David Cameron y a los ministros de economía y transporte italianos, y la Jefa de la Diplomacia estadounidense, Hillary Clinton. Lo que no es poco a la hora de tomar la decisión de deshacerse del ultimo escollo para retomar la producción plena de petroleo.
Sin embrago, luego de ver las decenas de imágenes de las golpizas y la forma en que fue capturado Gaddafi, uno se pregunta si los principales lideres mundiales no se habrán equivocado de socio y le habrán brindado financiamiento, armas y apoyo político a otro grupo de extremistas.
En relación a esto ultimo, no es inocente el comunicado del Fondo Monetario Internacional (FMI) donde ofrecía "ayuda al futuro gobierno libio, y se brindaba en todo lo que necesitaba para la reconstrucción del país, para lograr la prosperidad del pueblo de Libia". Uno no puede hacer mas que recordar viejos tiempo al leer este ofrecimiento de amistad por parte del FMI.
No es inocente por dos motivos, el FMI se erigió como el principal interlocutor entre los gobiernos de occidente y la mundialmente reconocida CNT, a la hora de negociar créditos para la reconstrucción de Libia y por otro lado, sera quien a través de estos créditos facilite la inversión segura de los conglomerados petroleros europeos y estadounidenses que esperaban ansiosos el final de esta historia.
En el medio de esta trama bélica-económica, se encuentra el ciudadano libio promedio. Que apoyo al ejercito rebelde con la fe de que este sera quien satisfaga sus necesidades de mejoras en sus condiciones de vida.
¿Que pasara con Libia ahora? Eso no lo sabremos hasta que los acontecimientos se sucedan. Solo podemos prever a partir de la experiencia que vivieron los países que entraron en esta histórica Primavera Árabe.
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Periodismo Digital, Guillermo Lopez. UNQ
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